El punto de vista de un viejo divisionario

martes, 25 de marzo de 2008

AVISO

Soy Alicia, nieta de Sento Ferrer.

Mi abuelo ha pasado unos días con los bronquios fastidiados. Aunque ayer ya se levantó e incluso salió a la calle, no termina de ponerse bien del todo. Esta mañana mi padre lo ha convencido y se lo ha llevado a casa para que se recupere con los cuidados y mimos adecuados, por lo que estará una temporada, espero que breve, sin revisar el blog. Mi padre es "más antiguo" que mi abuelo y no tiene conexión a internet en su casa. Claro que no es en lo único en lo que mi padre es más antiguo que mi abuelo.

Me ha pedido que venga para recogerle unos libros, su agenda, unas prendas de ropa que olvidó, darle un par de recados al vendedor de prensa y dejar este mensaje, por si la ausencia se prolonga demasiado. Y yo, como siempre, cumplo sus deseos como si fueran ordenes.

Me siento rara en su casa sola, su casa es una selva de libros, medallas y recuerdos que bastarían para llenar un museo. Aun sola, aquí siempre me siento acompañada.

Conociendo a mi abuelo, si va para largo, imagino que haré más viajes a esta casa

martes, 11 de marzo de 2008

De padres, hijos de los padres y otra clase de hijos

Este mensaje lo quería publicar el lunes. Pero, reconozco mis carencias, soy incapaz de colocar fotos, no se. He tenido que recurrir a mi nieto, a quien le agradezco el cable.

He oído como se habla en muchos sitios del pasado de los padres de unos y otros. Yo mismo he hablado de ellos. Del padre de Gabriel Elorriaga, de los Cabanillas, del abuelo de Aznar, del suegro de Gallardón, del otro abuelo de Zapatero, del padre de Bono, del padre de Belloch, del padre de la vicepresidenta, de Paco Narbona, el padre de Cristina...

Pero esta foto. ¡Ah!... cuando la vi en la prensa llamé a mi nieto. La quería en formato informático y la quería aquí.

Dejaré a Conchita Velasco. No hablaremos de Mihura ni de su vida en común con un camarada. No me gusta hablar de determinadas cosas. Hablaremos de Álvaro de Luna, de "El algarrobo".

Recuerdo que, cuando los Círculos Doctrinales José Antonio vivían, por la camaradería que me unía con algunos de sus miembros, accedí a dar una charla sobre la División. En ella, conocí a un chaval muy atlético, un toro, del que me quedé con el nombre por coincidir con el de un condestable de Castilla sobre el que estaba leyendo esos días: Álvaro de Luna.

Con el tiempo, reconocí esa cara en un actor de prometedora carrera. Recuerdo que presumía de conocer a "El algarrobo". Que tonto fui ¿verdad?.

Aquí no hablamos de tu padre, defensor de la ortodoxia. Hablamos de ti.

lunes, 10 de marzo de 2008

Tenemos lo que merecemos

Día de resaca electoral. Todos han ganado, menos los comunistas y los separatistas catalanes, de lo que me por otra parte me alegro.

Pero quien ha perdido, es España. No había alternativa real. Uno mata y el otro entierra. Uno hace el daño y el otro consolida. Uno empuja el estatuto catalán, y el otro hace otros peores, el valenciano y el andaluz, mientras se queja del primero. Hipócritas.

¿Que ha ganado el PSOE?. Duele. Como dolería un partido de acomplejados que no piensan más que en su cartera. La derecha demoniocristiana que ni es demócrata ni es cristiana.

Y mientras la gente se engaña y cree que vive en una democracia votando cada cuatro años al partido único, España se muere.

¿Queda alguien al que eso le importe?. Tiendo a pensar que solo a cuatro viejos y dos niños. Al resto solo le importa la hipoteca y el chiquilicuatro ese que va a Eurovisión, una muestra de lo que es este "sentir democrático", del "gusto de la gente", así nos va. Estúpidos.

Venga, lameros las heridas. Más os dolerá cuando esto no tenga vuelta atrás.

Duele vivir para ver este espectáculo. Estoy indignado, de ahí mi silencio.

sábado, 1 de marzo de 2008

Historia y Vida

Durante años fui fiel a esa revista. En sus orígenes estupenda, se fue estropeando de tal manera, que a menos de que algo me llame poderosamente la atención, prescindo de su compra y aun más de su lectura.

Este mes, desde la portada un artículo sobre Talleyrand me llamaba a gritos. Respondí y la compré.

Y la leí.

Casi todo iba bien (bueno, eso es una mentira piadosa) hasta que me encontré con un artículo llamado "Males de importación", firmado por Cristina Sáez (que afirma ser periodista, con dos narices), sobre las enfermedades del antiguo mundo que llegaron al nuevo con los españoles: gripe, viruela, sarampión... algo interesante para un enamorado de la historia de América y la de España, que en buena parte viene a ser lo mismo.

Hasta que me topé con la descripción de "el mayor genocidio de la historia de la humanidad" y un estúpido cuadro dedicado al uso intencionado de microorganismos como estrategia de guerra.

No son motivos derivados del miedo a que algo pueda pasarme por decir que lo pienso: soy demasiado viejo para ir a la cárcel. Ni responde a mi perfil el mantener escrupulosamente las formas. Pero uno pretende ser un caballero hasta el final y no puede decir en público las gruesas palabras que me cruzaron por la imaginación asociadas al nombre de la señorita que firma ese libelo.